Afirmar o negar… ¡que decisión!
Le tocó vivir esta semana a mi querida prima.
Pero la felicidad del momento y de lo que se viene en el futuro es su mayor sonrisa.
Sí, porque nosotras esperamos ese momento con el nerviosismo, la sencillez de ser maravillosas, la emoción de perdernos en el infinito con nuestra belleza, la que resplandece aún más con la sonrisa que caracteriza el momento.
Pues bien, el matrimonio… aquella realidad que tendrás que sobrellevar hasta que la muerte te separe.
Se veía preciosa, estaba como nunca… podía notar su nerviosismo, pero al final fluyó la confianza, hasta la forma vaga de decir: Ya está hecho, ya fue… dije que sí, ya me amarré.Pero no, más que eso, es la confianza que se podía notar en la decisión que tomó…
En la recepción, conversando ya, sólo nos aconsejaba que nos mantuviéramos solteras (con sonrisas de confidentes)
Puedo comprender su consejo, ya no más podrá ser la misma… pero sé que será mejor… porque es lo que ella decidió, es lo que cambió su vida, ese acontecimiento que completa su esquema y llena su futuro.
Mujer, vestirse de blanco, desfilar con miles de sentimientos encontrados, por un camino estrecho que te llevará a tu futuro.
Empezar una vida llena de cosas contradictorias, de alegrías, tristezas, conflictos, victorias… pero finalmente tu propio mundo, tu hogar.
Aquella fuerza que se te entrega en aquel momento que fluye la respuesta… fuerza que tendrás que aprender a usar, a defender.
A pesar de todo, comprendamos que nacimos para eso, se nos entregó aquella virtud de llenar ese espacio que sería triste sin nosotras…
Encajar en aquella casa, aquel dormitorio, aquella mitad de cama y acompañar el disfrutar del amanecer con alguien que no puedes entender que viste, la primera vez que tu corazón latió más fuerte… aquel instante que la respiración ya no daba más y que pasando el tiempo se convirtió en tu mejor opción en tu amor… en tu futuro.
Mujer que con esa unión encuentra y gana más de lo que se imaginaba, encuentra por fin, algo suyo…
Aquella sencillez con la que tratará de dar perfección a todo lo que tiene, aquellos cosas que ciertamente su compañero no notará, pero él será feliz con la comodidad que brindan esos pequeños detalles y ella sencillamente ganadora…
Que como una hechicera transformará en luz y sonrisas los dolores que siente en el alma, solo para que nadie lo note… Y aun tendrá fuerza para calmar aquellos sollozos de aquellos que buscan su hombro.
Pues si, ese es el matrimonio, aunque aún no lo vivo sé que llegará en cualquier momento, donde extrañaré mi soledad, pero seré feliz recibiendo compañía.
Hoy deseo lo mejor a aquellos que dijeron SI, dando de si mismos lo mejor… deseo que sean felices…
Pero aún sigo siendo aquella de la que digan: Cuando no esta mujer…Aún sigo soñando conmigo… aún no puedo separarme de esa sensación de unidad, aún no comparto mis límites, aún vivo cerca de la diversión, aún quiero compartir emociones con el mejor… aún no quiero sorprender a alguien con mi sueño de vivir hasta que la muerte nos separe…Así que aquel bouquet que recibí no tendrá mucha suerte, por lo menos en unos años…
Prima de mi vida, sé la más feliz del mundo… sé la mujer más feliz con la decisión afirmativa… y si no, pues piña ya te amarraste…Te amo mi Pati.
Y a ustedes muchachos, no duden en compartir su vida con alguien que demostró jugárselas con todo por ustedes.
Y si no, pues vivan, vivan mucho más… disfruten la soledad, la compañía momentánea… que luego se acaba y pasarán a la etapa que todos merecen…
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Marc Anthony and Jennifer Lopez - Escapemonos
